ALABANZA DE LOS SUEÑOS
En sueños
pinto como Vermeer van Delft.
Hablo griego con fluidez
y no sólo con los vivos.
Conduzco un coche
que me obedece.
Poseo talento
y escribo grandes poemas.
Oigo voces
no peor que los venerables santos.
Mis dotes pianísticas
os dejarían boquiabiertos.
Revoloteo como es debido,
es decir, por propio impulso.
Me precipito desde el tejado
y sé caer, suave, en el verdor.
No tengo problemas
para respirar bajo el agua.
No puedo quejarme:
he descubierto la Atlántida.
Por suerte sé despertar siempre
antes de morir.
En cuanto una guerra estalla
me vuelvo del otro lado.
Soy hija de mi época
pero no por obligación.
Hace un par de años
vi dos soles.
Y, anteayer, un pingüino.
Con meridiana claridad.
WISLAWA SZYMBORSKA
Después de escribir un largo comentario resulta que se ha borrado. Sería una señal.
ResponderEliminarMe gustó mucho el poema, yo utilizo una técnica que se llama "fantasía dirigida" para seleccionar sueños nocturnos, es poco espontánea y no siempre resulta, pero cuando resulta es muy buena. Nunca he volado con tanta fluidez como en sueños.
Al leer tu post, me he puesto a buscar un cuento que escribí hace muchos años sobre este tema, en una época en la que el recuerdo de lo soñado permanecía gran parte del día conmigo, voy a desempolvarlo y a colgarlo en el blog.
Un beso.
Qué curiso, Walden, a mí me ocurre lo mismo, a veces los sueños permanecen conmigo gran parte del día y si no es así aparece el recuerdo del sueño de la noche anterior justo antes de volverme a dormir. Suelo recordar los sueños con nitidez y es una buena técnica inspiradora. Gracias, amigo, por compartir este año 2011 conmigo y en esta tu casa. Feliz 2012 otra vez!!Besos!!
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